DISFRUTANDO DEL CELAJE
Aprovechando
las buenas condiciones que reúne la isla de Gran Canaria para observar el
celaje, siendo destino Starlight por la alta calidad de sus cielos, la noche
del día 15 de octubre los profesores y profesoras que participamos en el
proyecto “La huella de los Canarii III”, así como algunos familiares nos dimos
cita en la zona de Llanos de la Pez y El Garañón.
Recordar
que el Paisaje Cultural de Risco Caído es el
primer paisaje cultural Patrimonio Mundial que incluye la dimensión del celaje,
pues la sociedad aborigen canaria atrapada entre el mar y el cielo logró
desarrollar una cultura singular en la que fue esencial su relación con el
firmamento.
Allí
disfrutamos de una maravillosa velada astronómica guiada por la empresa
Astroeduca. En ella, recibimos nociones básicas de astronomía y conocimos cuáles son los 3 mejores lugares
del Planeta para la observación de las estrellas y por qué (altura adecuada,
condiciones de la atmósfera, ausencia de contaminación lumínica...). Dichos
lugares son el Roque de los Muchachos (La Palma), desierto de Atacama (Chile) y
Manua Kea (Hawái).
Seguidamente, el astrónomo Frank
Rodríguez, nos mostró las diferentes constelaciones que podíamos observar en
esta estación del año y a esa hora (10 de la noche), ya que debido al
movimiento de rotación y traslación de la Tierra, estas cambian de posición con
el paso del tiempo.
Pudimos
observar la constelación de Casiopea (en forma de w) y como utilizar esta para
localizar la estrella polar, rompiendo el mito de que la estrella polar es la
que más brilla en el firmamento, ya que esta es la estrella Sirio, y cómo es
utilizada la estrella polar en la
navegación por coincidir con el norte.
Después
de esta demostración a simple vista de las constelaciones procedimos a la
observación de las constelaciones, galaxias, nebulosas y planetas con dos telescopios
avanzados. A través de estos, observamos las diferencias entre una enana blanca
y una roja (Aldebarán), una nebulosa y
la galaxia más brillante de universo, Andrómeda, un sistema de estrellas
binario.
Por
último, observamos la Luna con dos
lentes, uno de más y otro de menos aumento, así como los planetas Júpiter y
Saturno, asombrándonos este último al ver con claridad sus anillos.
Una
velada inolvidable, con un grupo fantástico y un guía muy preparado que nos explicó
miles de detalles tan extensos como el propio celaje y que son difíciles de
plasmar en este blog, motivo por el cual los y las animo a vivir esta gratificante experiencia de nuestros cielos para
descubrir un paraíso casi desconocido.
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